Bizcocho marmolado

1) Lo primero que vamos a hacer para preparar este bizcocho marmolado es sacar los ingredientes de la nevera para que estén a temperatura ambiente y poner a precalentar el horno a 180º C con calor arriba y abajo. La masa base de este bizcocho es muy sencilla, ya que se hace con las medidas del vaso de yogur, al igual que el clásico bizcocho de yogur: 1 vasito de yogur, 1 vasito de aceite, 2 vasitos de azúcar y 3 vasitos de harina de trigo.
Ponemos en un bol los huevos con una pizca de sal y les añadimos el azúcar. Batimos con unas varillas eléctricas durante unos 5 minutos y a continuación, añadimos el yogur y batimos hasta que se mezcle bien. Después añadimos la esencia de vainilla y volvemos a batir.

2) Añadimos el aceite de girasol y batimos. Por último, vamos a añadir la harina de trigo y la levadura química (polvos de hornear) pasándolos previamente por un colador o tamiz para que no se formen grumos. Batimos con las varillas hasta tener una mezcla homogénea y sin grumos y ya tenemos lista la masa base de este bizcocho marmolado.

3) Una vez tenemos la masa lista, vamos a separarla en dos boles distintos. En el bol en el que preparamos la masa vamos a dejar sobre 1/3 del total de la masa y los otros 2/3 los ponemos en otro bol aparte. El bol donde hicimos la masa que es el que tiene menos cantidad es donde vamos a añadir el cacao.
Ponemos en un recipiente el cacao puro en polvo con la leche y mezclamos hasta que el cacao se disuelva perfectamente. Después, añadimos esta mezcla de cacao al bol de la masa y mezclamos bien.

4) Ahora que ya tenemos las dos masas listas, untamos el molde en el que vamos a hornear el bizcocho con mantequilla y lo espolvoreamos con un poco de harina. Vamos a ir vertiendo en el molde las dos masas de manera alternativa, de manera que ponemos primero una buena cantidad de la masa sin cacao y echamos encima un poco de la masa con cacao haciendo como unas ondas en el medio del molde. Volvemos a echar masa sin cacao y así repetimos la misma operación hasta terminar las dos masas. De esta manera vamos a conseguir ese efecto marmolado tan bonito y característico de este bizcocho.
Con el horno precalentado a 180º C con calor arriba y abajo, horneamos el bizcocho en la zona media-baja del horno a 170º C durante 50-55 minutos.
Pasados los 50-55 minutos, pinchamos el bizcocho con una brocheta para ver si está listo. Si la brocheta sale limpia, significa que el bizcocho ya está. Apagamos el horno y dejamos el bizcocho dentro con la puerta entreabierta durante 10 minutos.

5) Pasados los 10 minutos, sacamos el bizcocho del horno, lo desmoldamos y lo dejamos enfriar encima de una rejilla. Cuando el bizcocho haya perdido temperatura, ya está listo para comer.

Y ya tenemos listo para disfrutar este delicioso bizcocho casero ideal para la merienda o el desayuno!
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