Panna cotta con coulis de frambuesa

1) Lo primero que tendremos que hacer para preparar la panna cotta será poner a hidratar las hojas de gelatina en abundante agua fría durante unos 10 minutos. Mientras se hidrata la gelatina, cortamos la vaina de vainilla por la mitad y le sacamos las semillas con la ayuda de una puntilla. Para darle sabor a la panna cotta, lo ideal es utilizar vainilla natural pero si no la conseguimos, podemos sustituirla por esencia de vainilla.

2) Mientas acaba de hidratarse la gelatina, ponemos una olla a fuego medio y añadimos la nata, el azúcar, las semillas de vainilla, la vaina de la vainilla (opcional) y removemos con unas varillas para disolver el azúcar.

3) Dejamos unos 5 minutos a fuego suave removiendo de vez en cuando para que se aromatice la nata. Pasados los 5 minutos, retiramos la vaina de vainilla y si vemos que hay demasiadas semillas en la nata, podemos pasar la nata por un colador fino. Escurrimos las hojas de gelatina que ya estarán blanditas y las añadimos a la olla. Apagamos el fuego y removemos para disolver la gelatina en la nata que estará aún caliente.

4) Una vez está bien disuelta la gelatina, vertemos la mezcla en los vasitos (nosotros usamos moldes de flan) y dejamos que se enfríen. Cuando tengamos las panacota a temperatura ambiente, las metemos en la nevera para que se acaben de cuajar (necesitarán unas 5-6 horas).

5) Mientras se enfrían las panna cotta vamos a preparar el coulis de frambuesa. Ponemos las frambuesas en una olla con el azúcar y el agua. Dejamos cocer 5 minutos para que se deshagan y las colamos para eliminar las semillas. Si quieres ver cómo hacer el coulis de frambuesa de manera detallada y con todas las fotos del paso a paso, en la lista de ingredientes encontrarás el enlace de la receta.

6) Cuando tengamos las panna cotta cuajadas sólo nos queda emplatar. Colocamos una cucharada de coulis de frambuesa en el plato, desmoldamos la panna cotta y decoramos con un par de frambuesas y unas hojas de menta.
Para desmoldar la panna cotta necesitaremos un cuchillo para separarla del molde y un recipiente con agua caliente en donde meteremos el molde unos 5 segundos para facilitar que salga la panacota.

Ya tenemos la panna cotta o panacota lista, un postre fácil de preparar que podemos comer frío recién sacado de la nevera o, si lo preferimos a temperatura ambiente, sacándolo de la nevera unos 10 minutos antes de servir.
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