Descripción de la receta
Las cañas fritas son un dulce tradicional de la gastronomía gallega y son especialmente famosas las cañas fritas de O Carballiño, un pueblo de Ourense donde este dulce es muy típico. En esta receta te enseñamos a preparar de manera fácil y con todas las fotos del paso a paso las cañas fritas rellenas de crema, uno de los postres más populares del Carnaval en Galicia.
Ingredientes para cañas fritas rellenas de crema para 4 personas
- Para la masa de las cañas
- Harina de trigo200 g
- Azúcar20 g
- 50 g
- Agua100 g
- Sal3 g
- Aceite de girasolPara freír
- Azúcar y canela el polvoPara embadurnar
- Para la crema pastelera
- 500 ml
- Mantequilla10 g
- Azúcar150 g
- 3
- Maicena50 g
- Piel de limónMedio limón
- Canela en rama1 rama
Pasos de la receta
1) Esta receta de cañas fritas rellenas a priori puede parecer más complicada de lo que realmente es pero os aseguramos que no es una elaboración ni difícil ni latosa. La masa es muy muy sencilla de hacer al igual que la crema pastelera. Lo único a lo que le tenemos que coger un poco el truco es a enrollar la masa en los canutillos de las cañas pero una vez hagamos las dos primeras, el resto es pan comido.
Lo primero que vamos a hacer es preparar la masa de las cañas fritas. Deciros que con las cantidades de estas receta nos van a salir unas 24 cañas aproximadamente. Tenemos que sacar la manteca de cerdo de la nevera con una media hora de antelación para que cuando la vayamos a añadir esté totalmente blandita.
Ponemos en un bol la harina de trigo (es harina de trigo normal) y le añadimos el azúcar y la sal y mezclamos bien con una espátula de madera. Después, hacemos un hueco en el medio de la harina como si fuera un volcán y añadimos en ese hueco el agua y la manteca de cerdo (ambas a temperatura ambiente).
2) Mezclamos bien con la espátula hasta que la harina haya absorbido todo el líquido y después amasamos un poco con las manos bien limpias dentro del bol. Cuando tengamos una masa ya algo compacta, pasamos a amasar la masa en la encimera durante 3-4 minutos hasta tener una masa blandita, perfectamente lisa y homogénea.
Colocamos la masa en un bol que habremos engrasado en la base con un poquito de aceite de girasol y la vamos a dejar reposar. Deciros que nosotros hicimos 3 pruebas diferentes con el reposo de la masa y la verdad que de las 3 maneras nos salieron bien las cañitas. Una opción es dejar reposar la masa a temperatura ambiente y tapada con un paño de cocina durante solo 30 minutos, otra opción fue dejarla reposar en la nevera tapada con film durante 8 horas y la tercera opción, también en la nevera durante 24 horas. Como dijimos antes, de las 3 maneras la masa se estiró bien y las cañas quedaron finas, crujientes y ricas.
3) Mientras la masa reposa, vamos a ir haciendo la crema pastelera ya que también hay que dejarla enfriar.
Separamos un vaso de leche del total de leche que vamos a utilizar y el resto de la leche la vamos a poner en una olla pequeña o un cazo. Ponemos la olla a fuego medio y añadimos la piel de limón (evitando la parte blanca que es amarga), la canela en rama y la mantequilla.
4) Mientras se va aromatizando la leche, separamos las yemas de las claras e incorporamos las yemas al vaso de leche que teníamos reservado. Batimos bien y cuando las yemas y la leche estén bien mezcladas, añadimos la maicena y batimos hasta que se disuelva por completo y no haya ningún grumo.
5) Cuando la mantequilla se haya derretido completamente, añadimos el azúcar y mezclamos bien todos los ingredientes con unas varillas. Después, cuando la leche quiera romper a hervir, sacamos la piel de limón y la canela en rama. A continuación, incorporamos el batido de la leche con la maicena y mezclamos bien con las varillas.
6) Sin dejar de remover, esperamos a que la mezcla vaya espesando. Vamos a ir viendo como la mezcla que teníamos líquida va a ir cogiendo textura de crema poco a poco. Este proceso puede llevar unos minutos, dependiendo un poco del fuego.
Cuando la crema haya espesado completamente, la retiramos del fuego y ya estaría lista nuestra crema pastelera. Solo nos falta dejarla enfriar un poco ya que para poder utilizarla necesitamos que pierda algo de temperatura. Podemos colocarla en un bol y ponerle film transparente en contacto con la crema para que no forme costra. Cuando esté templada, la metemos en una manga pastelera y la guardamos en la nevera hasta el momento de rellenar las cañas fritas.
7) Cuando la masa haya reposado ya podemos ponernos manos a la obra a hacer las cañas. Vamos a necesitar los típicos canutillos de acero inoxidable que pueden ser rectos como los que usamos nosotros o cónicos. Vamos a engrasar con un poquito de aceite de girasol todos los canutillos, el rodillo y la encimera (solamente hace falta engrasarlos con la primera tanda de cañas).
Cortamos la masa en cuatro trozos más o menos iguales y vamos a empezar estirando uno de los trozos y reservamos los otros tres.
8) Estiramos con el rodillo de cocina hasta tener una tira de masa que sea más o menos del largo del rodillo y de unos 10 cm de ancho aproximadamente (no hace falta que nos quede un rectángulo perfecto). Después, vamos a cortar tiras que tengan sobre 1,5 cm de ancho que vamos a estirar de una en una. Estiramos con el rodillo cada tira hasta que tenga más o menos el largo del rodillo y unos 3-4 cm de ancho aproximadamente. Lo importante es que nos quede una tira muy muy finita de masa pero que no se rompa.
9) Para enrollar la tira de masa, ponemos el canutillo en el extremo inferior de la tira y dejamos libre como unos 3 cm de la parte inferior del canutillo. Empezamos a enrollar la tira hacia arriba y un poquito en diagonal hacia la izquierda como se ve en la foto. Cuando estemos llegando al final de la tira, ya deberíamos tener cubierto todo el canutillo y nos tendría que sobrar un poquito de masa para cerrar la parte de arriba del canutillo como se ve en la foto.
10) Repetimos la misma operación con todos los canutillos y ya podemos pasar a freír las cañas. Para freír las cañas, ponemos una cazuela pequeña a fuego medio con abundante aceite de girasol (en nuestra vitrocerámica tuvimos el fuego todo el rato al 6 de un máximo de 9). Cuando el aceite esté caliente, freímos las cañas en tandas de 2 en 2 para que aceite no baje demasiado de temperatura. Vamos a freír las cañas sobre 1 minuto, les damos la vuelta con la ayuda de dos tenedores y las dejamos freír otro minuto por este lado. Después, sacamos las cañas de la cazuela con la ayuda de unas pinzas, dejando escurrir bien el aceite que se haya metido por dentro del canutillo. Vamos colocando las cañas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Es normal que durante la fritura salgan pequeñas burbujas en la masa o que el aceite salte un poco, así que hay que tener cuidado en este momento de freír aunque estemos friendo a temperatura media.
11) Esperamos un par de minutos a que los canutillos pierdan un poco de temperatura y los desmoldamos, ya que hay que hacerlo en caliente para que las cañas fritas salgan con facilidad. Para no quemarnos, sujetamos la parte inferior del canutillo con un paño de cocina y la caña la cogemos con papel de cocina. Con cuidado y delicadeza, hacemos girar suavemente el canutillo a la vez que tiramos de él hacia fuera y ya vamos a ver cómo las cañas salen sin problema.
Después, pasamos las cañas por una mezcla de azúcar y canela y las reservamos hasta el momento de rellenar.
Esperamos a que los canutillos de acero se enfríen y repetimos la misma operación con toda la masa (la verdad que lo ideal sería tener tantos canutillos como cañas vamos a preparar pero si solo tenéis 6 como nosotros, toca esperar a que se enfríen para volver a formar más cañas).
Como se ve en la foto, las cañas quedan súper finitas y con la parte posterior perfectamente cerrada aunque decir que se podría dejar ese extremo abierto perfectamente ya que la crema no se va a salir, es más una cuestión estética dejarlas así cerraditas por detrás.
Lo que sí es importante es no rellenar las cañas fritas hasta prácticamente el momento de servir para que no se ablanden y se mantengan perfectamente crujientes que es parte de la gracia de este dulce. Rellenamos las cañas con la manga pastelera a la que le habremos puesto una boquilla fina para que la crema se deslice mejor por el interior de la caña.
Y ya tenemos listas para disfrutar estas deliciosas y crujientes cañas fritas rellenas. En esta ocasión las rellenamos con crema pastelera pero nata montada o trufa son también dos opciones fantásticas para rellenar estas cañas.
¿QUÉ OPINAS DE ESTA RECETA DE CAÑAS FRITAS RELLENAS DE CREMA PASTELERA?
Y si te animas a preparar esta receta tradicional de Carnaval de cañas fritas de Carballiño, nos encantaría saber qué tal fue el resultado. Más abajo puedes compartir la receta o puntuarla.
Notas y recomendaciones para hacer cañas fritas rellenas de crema
- Con esta receta de cañas fritas, nos van a salir unas cañas finitas y crujientes que están para chuparse los dedos.
- Al principio puede costarnos un poco cogerle el truco a estirar la masa y enrollarla en el canutillo de acero. Podemos hacer un par de pruebas y si no nos salen bien, recuperamos la masa, la volvemos a hacer una bola y la dejamos reposar unos minutos para volver a estirarla. Lo más importante es que nos quede la masa muy finita pero que no se rompa.