Un rebozado es la técnica que consiste en cubrir totalmente un alimento con una mezcla para posteriormente freírlo.
Dentro de los rebozados, podemos distinguir los siguientes tipos.
Enharinado
Consiste en cubrir el alimento únicamente con una capa fina de harina. Se utiliza especialmente con pescados y un truco para que quede la fritura perfecta es, además de sacudir un poco el exceso de harina, ir enharinando el alimento a medida que lo vayamos echando a freír. De esta manera la capa de harina no se va a humedecer y nos quedará el rebozado bien crujiente y dorado. Un ejemplo de enharinado es el clásico rebozado llamado “a la andaluza”.
Empanado
Consiste en cubrir el alimento primero con huevo batido y después cubrirlo con pan rallado. Aquí el truco es dejar escurrir bien el exceso de huevo. Hay quienes en esta técnica de empanado pasan primero el alimento también por harina pero no es lo más habitual. Un ejemplo de empanado serían el clásico rebozado de las croquetas, los flamenquines o las pechugas de pollo a la Villaroy.
Rebozado
Consiste en pasar el alimento primero por harina y después por huevo. Se utiliza principalmente con pescados y un ejemplo sería el clásico rebozado llamado “a la romana”.
Gabardina
Consiste en cubrir el alimento en una masa medio líquida hecha con una mezcla de harina y huevo a la que habitualmente se le añade también cerveza y un impulsor químico, lo que hace que el rebozado quede súper esponjoso. Un ejemplo de este rebozado son las clásicas gambas a la gabardina o también las famosas berenjenas rebozadas.