Espárragos blancos a la plancha

1) Para preparar esta receta de espárragos blancos a la plancha, vamos a utilizar espárragos frescos aprovechando que estamos en plena temporada del Espárrago de Navarra pero esta receta podría hacerse igualmente utilizando unos buenos espárragos en conserva. Dicho esto, si tenéis oportunidad, no dejéis de comprar espárragos frescos cuando están en temporada que viene siendo desde mediados de Abril hasta finales de Mayo. Los espárragos blancos frescos son una auténtica delicia, aunque sea simplemente cocidos y aliñados con un poquito de aceite de oliva. Pero en esta receta, vamos a darle un plus de sabor al cocinarlos a la plancha una vez cocidos, de manera que el toque de tostado junto con unas escamitas de sal que les vamos a añadir al final hacen que la combinación de sabores y texturas sea deliciosa.
Lo primero que vamos a hacer es preparar los espárragos blancos para cocerlos. Para ello, lavamos y secamos los espárragos y una vez limpios, vamos a cortar la parte inferior del tallo que es muy dura y con textura leñosa (al final de la receta encontraréis el enlace a la crema de espárragos que preparamos con los tallos). Después, con la ayuda de un pelador o puntilla, pelamos los espárragos quitando las 2-3 capas más exteriores de la parte fibrosa que los cubre.
La mejor forma de cocer los espárragos blancos es haciendo un atado con los espárragos y cocerlos de pie en una olla alta cubiertos con agua hasta la yema, que es más delicada. Pero como la mayoría no tenemos en casa ese tipo de ollas, los vamos a cocer tumbados y también nos van a quedar perfectos.

2) Para cocer los espárragos, ponemos una cazuela a fuego medio-fuerte con el agua suficiente para que los espárragos floten y cuando el agua empiece a hervir, bajamos el fuego a fuego medio, añadimos la sal, el azúcar y removemos para que se disuelvan bien en el agua (el agua no debe hervir a borbotones, con un ligero hervor es suficiente). Cuando el agua vuelva a hervir, colocamos los espárragos y dejamos que se cocinen durante 12-15 minutos dependiendo del grosor y de lo frescos que estén los espárragos (cuanto más tiempo pasa desde su recolección, más tienden a endurecerse por lo que tardarán más en cocerse).

3) Pasados los 12 minutos apagamos el fuego y tapamos la cazuela. Con los 12 minutos de cocción, ya estarán los espárragos prácticamente en su punto pero los vamos a dejar reposar en la cazuela hasta que el agua prácticamente se ponga a temperatura ambiente.
Después de este tiempo de reposo podemos comprobar que los espárragos blancos están en su punto, firmes pero perfectamente cocidos, pinchándolos con un cuchillo. Retiramos los espárragos con cuidado para que no se rompan y los colocamos en una fuente. Después, los secamos bien con papel absorbente para eliminar la mayor cantidad de agua posible antes de cocinarlos a la plancha.

4) Ahora añadimos un chorrito de aceite de oliva por encima de los espárragos y los pincelamos bien por toda su superficie (o los embadurnamos directamente con las manos bien limpias). Para hacer los espárragos blancos a la plancha, ponemos una plancha o sartén antiadherente a fuego medio-alto. Cuando la plancha esté bien caliente, añadimos otro chorrito de aceite de oliva y colocamos los espárragos en tandas de pocas unidades. Cocinamos los espárragos sobre minuto o minuto y medio por un lado, les damos la vuelta y los dejamos otro minuto o minuto y medio por el otro lado, hasta que se pongan bien tostaditos. Sacamos los espárragos a una fuente y les añadimos por encima un poco de sal en escamas.

Servimos inmediatamente los espárragos a la plancha, calentitos recién hechos que es cómo más ricos están.
¿QUÉ OPINAS DE ESTA RECETA DE ESPÁRRAGOS BLANCOS A LA PLANCHA?
Y si te animas a preparar esta receta de espárragos blancos frescos a la plancha, nos encantaría saber qué tal fue el resultado. Más abajo puedes compartir la receta o puntuarla.