Salmorejo de remolacha

1) En esta receta vamos a preparar un salmorejo de remolacha, una alternativa al salmorejo clásico que podemos preparar para aprovechar remolacha cocida que nos haya sobrado de otras elaboraciones o simplemente para probar esta variante de salmorejo. Dicho esto, tenemos que decir que aunque sin duda nuestro preferido es el salmorejo cordobés clásico, esta opción con remolacha está muy rica y tiene un color súper vistoso.
Lo primero que vamos a hacer es lavar muy bien los tomates, retirarles el pedúnculo y cortarlos en trozos regulares. Pelamos el diente de ajo y le retiramos el germen interior. Cortamos la remolacha cocida y el pan en trozos. La remolacha la podemos cocer nosotros en casa o bien, utilizar remolacha de la que ya se vende cocida y envasada al vacío (se encuentra en el súper en la zona de las verduras).

2) Para hacer el salmorejo de remolacha, podemos usar una batidora de vaso o de mano pero nos va a quedar una textura mejor si usamos batidora de vaso. Ponemos en el vaso batidor los tomates, el ajo y la remolacha y trituramos hasta tener una mezcla bien licuada. Después, vamos a colar esta mezcla para eliminar todos los restos de piel y pepitas de los tomates.

3) Volvemos a poner la mezcla en el vaso batidor, añadimos el pan y trituramos hasta tener una mezcla homogénea. Después, añadimos la sal y volvemos a triturar añadiendo el aceite de oliva en forma de hilo a la vez que la batidora está en marcha. Cuando hayamos incorporado todo el aceite, continuamos triturando unos segundos más para tener una mezcla muy bien emulsionada como la que se ve en la foto. En este punto, el salmorejo ya está listo y lo vamos a guardar un recipiente bien cerrado en la nevera hasta el momento de servir para que esté bien fresquito.

En esta ocasión, servimos el salmorejo de remolacha acompañado de unos daditos pequeñitos de manzana Granny Smith y un chorrito de aceite de oliva pero también podríamos acompañarlo de unos daditos de queso feta o de cabra, un poquito de yogur natural, unos frutos secos picaditos,...El acompañamiento ya queda un poco al gusto de cada uno.
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