Pestiños caseros, con miel o con azúcar

1) Vamos a preparar unos pestiños de la abuela, un postre tradicional que es una auténtica delicia y que podemos hacer bañados con un almíbar de miel o simplemente emborrizados con azúcar. De las dos maneras están buenísimos.
Lo primero que vamos a hacer para preparar la masa de los pestiños caseros es aromatizar el aceite de oliva. Para ello, ponemos el aceite de oliva en un cazo a fuego medio-fuerte y le añadimos la cáscara de medio limón (evitando la parte blanca que es amarga). Freímos la cáscara de limón hasta que los bordes empiecen a ponerse doraditos y en ese momento, apagamos el fuego y añadimos el sésamo tostado y el anís en grano. Dejamos que el aceite se temple un poco dentro del cazo y después, lo pasamos a un bol para que se enfríe completamente. Cuando el aceite esté frío, retiramos la cáscara de limón.

2) En un bol amplio colocamos la harina de trigo, le añadimos una pizca de sal y mezclamos con una cuchara. A continuación, hacemos un hueco en medio de la harina como si fuera un volcán y añadimos el vino blanco y el aceite con el sésamo y el anís.

3) Mezclamos en un primer momento con la cuchara para que los ingredientes se vayan integrando y cuando tengamos una mezcla algo compacta, pasamos a amasar la masa con las manos hasta tener una bola de masa bien redondita, lisa y homogénea. Colocamos la masa en el bol y la vamos a dejar reposar tapada con un paño de cocina durante 30 minutos.

4) Mientras la masa reposa, vamos a preparar el almíbar de miel ya que necesitamos tenerlo preparado antes de freír los pestiños. Para hacer el almíbar de miel, ponemos un cazo a fuego medio-fuerte con el agua, el azúcar, la miel y un chorrito de zumo de limón. Mezclamos bien con unas varillas y desde que el agua empiece a hervir, dejamos cocer el almíbar unos 7 minutos o hasta que veamos que la mezcla se vuelve espesa. Reservamos el almíbar en un bol donde después bañaremos los pestiños.

5) Cuando la masa haya reposado, ya podemos pasar a estirarla para formar los pestiños. Podemos dividir la masa en dos partes para que nos sea más fácil estirarla. Estiramos la masa con el rodillo hasta tener una lámina fina que tenga sobre 3-4 mm de grosor. Después, vamos a cortar un rectángulo o un cuadrado y le volvemos a pasar otra vez el rodillo porque la masa tiende a encogerse un poco. Después, vamos a cortar cuadraditos de masa que tengan un tamaño aproximado de 4x4 cm, de manera que podemos hacerlo a ojo o usando un metro para que nos salgan todos iguales. Recuperamos los recortes de masa y repetimos la misma operación hasta tener toda la masa de los pestiños cortada en cuadraditos.

6) Para formar los pestiños, cogemos un cuadradito de masa y lo estiramos un poco con las manos. Después, llevamos hacia dentro una de las esquinas, la humedecemos por encima con un poquito de agua y le doblamos encima la esquina contraria, haciendo un poco de presión para que el pestiño quede bien sellado y no se abra en la fritura.

7) Cuando hayamos formado todos los pestiños ya podemos pasar a freírlos. Para freír los pestiños, ponemos un cazo a fuego fuerte con aceite de girasol y cuando el aceite esté bien caliente, vamos friendo los pestiños en tandas de 6-7 unidades. Freímos los pestiños sobre minuto y medio o 2 minutos y después, los sacamos del cazo escurriendo bien el aceite y los colocamos en una fuente con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

8) Para hacer los pestiños con miel, con los pestiños calientes, vamos a sumergirlos en el almíbar de miel unos 5 minutos hasta que se queden perfectamente impregnados con el almíbar. Después, los sacamos del almíbar y los colocamos en la fuente donde los vayamos a servir.
Para hacer los pestiños con azúcar, con los pestiños también calientes, simplemente tenemos que pasarlos por un bol con azúcar hasta que queden perfectamente emborrizados por todos los lados.

Y ya podemos disfrutar de nuestros pestiños caseros!!Un postre tradicional que está para chuparse los dedos!
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