Cachopo asturiano de ternera

El cachopo de ternera es uno de los platos más conocidos de la cocina asturiana que en los últimos años se ha hecho súper popular en el resto de España de manera que lo podemos encontrar en las cartas de muchos bares y restaurantes fuera de Asturias.
El cachopo tradicional se hace con dos filetes de ternera. Hay personas que usan un filete grande que después cierran como en libro pero lo tradicional es hacerlo con dos filetes que se colocan uno encima del otro poniendo en el medio jamón serrano y queso para después empanar y freír.
En cuanto a qué filetes de ternera usar, dejaos aconsejar por vuestra carnicería de confianza. Tenemos que pedir que nos corten unos filetes finitos y que sean tiernos, a poder ser de una pieza con poca grasa o nervios por el medio. Como referencia de peso, nosotros usamos filetes que pesaban unos 100 g cada uno, de manera que nos va a salir un cachopo de ración bastante generoso, ya que una vez formados tienen sobre 23-25 cm de largo y unos 12 cm de ancho, un tamaño perfecto para freírlos en una sartén grande .
Si los filetes tienen algo de grasa o nervio por el borde exterior (como los que se ven en la foto que usamos nosotros), se la retiraremos para que después en la fritura no se encojan. Una vez limpios los filetes, vamos a espalmarlos. ¿Y qué es espalmar? Pues espalmar la carne significa aplastarla con algún utensilio para aplanarla y romperle las fibras. Podemos hacerlo con un mazo de carne o como hicimos nosotros con la base de un cazo de cocina. Primero tenemos que meter cada filete en medio de film transparente y humedecerlo ligeramente con un poquito de agua y a continuación, darle golpes con la base del cazo hasta que el filete se aplane y aumente considerablemente de tamaño. Lo de humedecer un poco el filete es para que el film resbale cuando golpeamos con el cazo y así no se nos va a romper el filete.

Una vez que ya tenemos los filetes bien planitos, vamos a empezar a montar el cachopo. Primero le añadimos sal y pimienta negra molida a uno de los filetes, solamente por un lado y ponemos ese lado hacia abajo. Ahora colocamos 2 lonchas finas de jamón serrano a lo largo del filete, ponemos encima 3 lonchas finitas de queso y terminamos cubriendo con el otro filete.
En cuanto a qué jamón serrano y qué queso usar, obviamente que cuanto de mejor calidad sean los dos productos, más rico estará el cachopo. El jamón serrano no hace falta que sea el mejor jamón del mundo pero sí que tenga una calidad aceptable. Y en cuanto al queso, el que más os guste, nosotros en esta ocasión usamos un queso de barra ahumado que nos gusta mucho pero lo dicho, podemos usar cualquier queso que funda bien.
Dicho esto, el relleno de jamón y queso es el más tradicional pero podemos rellenar el cachopo con otros ingredientes y también estará delicioso: cecina, Cabrales, cebolla caramelizada...Es cuestión de probar y elegir nuestro relleno favorito!

Añadimos sal y otra pizca de pimienta negra molida por encima de este segundo filete y después, vamos a intentar sellar un poco con los dedos todo el borde exterior del cachopo como para que se quede bien cerradito.

En este punto, ya podemos pasar a empanar los cachopos y en este sentido, tendremos en cuenta el tamaño del cachopo para utilizar unas fuentes o bandejas de un tamaño parecido y así no andar manipulando el cachopo de un lado para otro con el consiguiente riesgo de que nos desmonte.
Pasamos primero el cachopo por harina de trigo, sacudiendo después un poco el exceso de harina que pueda coger y después, lo pasamos por huevo batido. Igualmente sacamos el cachopo escurriendo un poco el exceso de huevo y por último, lo pasamos por pan rallado.

Y ya por último solo nos queda freír el cachopo. Como dijimos al principio, tenemos que usar una sartén que sea lo suficientemente grande para que nos entre el cachopo perfectamente. Ponemos la sartén a fuego medio-fuerte con abundante aceite de oliva (o de girasol) y cuando el aceite esté caliente, colocamos el cachopo y lo vamos a freír sobre 1 minuto por cada lado con cuidado al darle la vuelta para que se mantenga intacto. Después, lo sacamos de la sartén escurriendo bien el aceite y lo colocamos en una fuente con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

Nosotros acompañamos el cachopo de la manera más tradicional, con unas patatas fritas sencillas y un poco de pimiento morrón pero una ensalada o unas patatas paja también son una guarnición estupenda.
¿QUÉ OPINAS DE ESTA RECETA DE CACHOPO DE TERNERA?
Y si te animas a preparar esta receta típica asturiana de cachopo clásico de ternera, nos encantaría saber qué tal fue el resultado. Más abajo puedes compartir la receta o puntuarla.